No se, quizás llegaste buscando carta en tu correo, quisiera que así fuera, pero no, esta vez no te escribiré, si así lo hiciera hablaría de tus labios dulces, fresas con crema, de tus ojos donde se pierde mi templanza. Pero no, esta vez no lo haré y tampoco te diré como muero por besarte y de lo maravilloso que es oirte.
Si quisiera cambiar de opinión y lo hiciera, quizás hablara del perfume que acompaña tu cuello, de la redondez de tu pecho, de esas caderas que me enloquecen, esas piernas, del suave tacto de tu piel, pero no, no cambiaré de opinión.
Si finalmente escribiera sería para contarte como me haces sentir un hombre, una persona viva, de como cambias mi existencia y lo feliz que soy cuando nos emparejamos, pero no, tampoco te lo diré.
Para que decirte lo que ya bien sabes, tantas veces te lo dije , quizás lo hiciera para agradecerte por tu visita, por permitirme sentirte mía aunque quieras permanecer lejana.
No, lo mejor será que no te escriba y me guarde mis deseos de decirte tantas cosas.
lunes, 27 de abril de 2009
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario