lunes, 9 de julio de 2007

Mérida

Ya estando aquí deje mi mochila y me lleve a Emma a caminar por el centro, tomamos un autobús de la linea urbana y nos fuimos directos al centro de Mérida y a caminar se ha dicho, vimos desde la catedral, museos, mercado municipal (el clásico, no el nuevo), edificios históricos, fuimos a un restaurant a comer la clásica cochinita pibil y ella pidió unos huevos motuleños, algo que he notado es que aquí se consume mucho huevo de gallina (o blanquillos), hay hasta expendios de huevos, cuando en otras partes lo que ves son expendios de refrescos o de cerveza (principalmente), hay un platillo muy yucateco que viene siendo una tortilla mantecosa con huevo rallado y encima una poca de carne, ya sea de puerco o de pollo, se come como si fuera un taco; seguimos caminando por calles muy angostas, donde apenas caben dos carros, con aceras un poco angostas, máximo 2 personas al lado, la tercera ya no cabe, mucha gente de compras, mucho turista americano, generalmente andan en pareja; entramos en unos portales donde se compro una cachucha para el sol ya que andaba sudando la gota gorda, yo por mi parte me tome una bebida que no hay para mi tierra, se llama CRISTAL, es negra, aunque ya he visto que hay de otros sabores, el que no recomiendo es uno con sabor a CEBADA ya que de ese sabor simplemente no tiene casi nada y si bastante gas, lo que la vuelve de un sabor picoso, de lo mas destacado de ese día fue el agua que nos tomo desprevenidos ya que aunque el cielo estaba parcialmente nublado no había visos de que fuera a llover, simplemente llego una nube loca y se descargo sobre nosotros, no con mucha fuerza ni cantidad, simplemente se descargo, lo que hizo que nos refugiáramos en la pared de una iglesia vetusta que se encontraba cerrada, al pasar el agua ya tomamos un camión a la casa y santo remedio. Ambos llegamos cansados y como la parada del camión estaba cerca de un OXXO llegamos a comprar algo para cenar, ella ceno un hotdog y yo me comí un par de conchitas bimbo (muy alimenticio) y de paso nos trajimos refrescos para tener en casa pues no había ni agua fría en el refrigerador, un buen baño para quitarnos el sudor de encima, una charla y a ver tv, ella en su cuarto y yo en el mio, aunque entre ver SKY o escuchar la radio termine escuchando la radio hasta que me quedé dormido. Ese fue mi primer día en Mérida.

No hay comentarios.: